Consagrados desde un comienzo como lugares de identidad y manifestación de rituales cívicos, religiosos o artísticos, los teatros han cambiado de la mano de la transformación de las ciudades y los cambios sociales, políticos, económicos y culturales en las sociedades que loa cogen. Entender ese rol social, relevar su valor en el contexto en que surgieron y mirar nuestro propio pasado y presente son algunos de los propósitos de la colección Teatros de Chile, un inédito estudio que consta de tres volúmenes, que repasa la naturaleza e historia, relatos y datos de las salas nacionales y sus protagonistas.
Este segundo volumen nos envuelve en la historia, relatos y datos de las salas de Santiago y Valparaíso desde 1930 hasta nuestros días. Las artes viajan a través del tiempo y sus creaciones nutren la imaginación y los sueños de la sociedad chilena de la época; los teatros acogen las expresiones del arte y transforman esa experiencia en memoria colectiva. Ahí están estos espacios de entretención con sus distintos estilos arquitectónicos, costumbres y entornos sociales, la aparición y popularidad de nuevos géneros artísticos, la construcción e influencia de escenarios mayores y la emergencia de compañías, elencos y renovados lenguajes creativos que van marcando un sello distintivo de los teatros en su evolución.
El teatro es, junto con el cine, uno de los acontecimientos culturales más importantes en el desarrollo de la sociedad chilena durante el siglo XX, en particular porque a través de su dramaturgia refleja como pocos las transformaciones experimentadas por el país. Las páginas de este libro invitan también al lector a apreciar de qué modo algunos escenarios en la capital han sido capaces de permanecer en el tiempo mediante renovaciones y ampliación de su función original, extendiendo su vigencia durante más de medio siglo, gracias a los esfuerzos de personas e instituciones desde ámbito privado y público.
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